El aluminio es uno de los metales más utilizados, ¿sabes cómo se extrae y produce el aluminio?
La bauxita es una roca compuesta de óxidos de aluminio y otros minerales y es la principal fuente mundial de aluminio. Después de la extracción, la bauxita se refina para obtener alúmina, que luego se convierte en aluminio. El aluminio suele pasar por tres etapas desde el mineral hasta el metal:
La primera etapa: extracción de bauxita.
La bauxita suele extraerse en minas a cielo abierto, y sólo tres países (Australia, China y Guinea) representan el 72% de la producción mundial de bauxita.
Australia es, con diferencia, el mayor productor de bauxita y alberga la mina Wippa, la empresa minera de bauxita más grande del mundo.
Guinea es el tercer mayor productor de bauxita, con más de 7 mil millones de toneladas de reservas de bauxita, más que cualquier otro país. Además, Guinea es el mayor exportador mundial de bauxita y el 76% de sus exportaciones de bauxita se destinan a China.
Una vez extraída la bauxita, se envía a refinerías de todo el mundo para producir alúmina, lo que marca la segunda etapa del proceso de producción.
La segunda etapa: producción de alúmina.
En la década de 1890, el químico austriaco Karl Joseph Bayer inventó un método revolucionario para extraer alúmina de la bauxita. Hoy, más de 100 años después, alrededor del 90 por ciento de las refinerías de alúmina todavía utilizan el proceso Bayer para refinar la bauxita.
Hay cuatro pasos clave en el proceso de Bayer: 1) refinación, 2) cribado, 3) deposición y 4) tostación.
China es el segundo productor y el mayor importador de bauxita del mundo y suministra más de la mitad de la alúmina del mundo.
Varios productores importantes de bauxita, incluidos Australia, Brasil e India, son los mayores productores de alúmina, aunque ninguno de ellos iguala al de China.
La alúmina se utiliza en varias industrias, incluidas las de plástico, cosmética y producción química. Por supuesto, gran parte se envía a fundiciones para producir aluminio.
La tercera etapa: producción de aluminio.
La alúmina se convierte en aluminio mediante reducción electrolítica. Además de la propia alúmina, otro mineral llamado criolita es clave para el proceso, junto con mucha electricidad.
En las instalaciones de fundición de aluminio, cientos de celdas electrolíticas se llenan con criolita fundida. Se vierte alúmina en estas células y una fuerte corriente eléctrica rompe el enlace químico entre los átomos de aluminio y oxígeno. El resultado de la electrólisis es que el líquido de aluminio puro se deposita en el fondo del electrolizador y luego se purifica y se moldea en varias formas y tamaños.
China domina la producción mundial de aluminio y es el mayor consumidor. La vecina India, con sólo una décima parte de la producción de China, ocupa el segundo lugar.
Al igual que ocurre con la producción de alúmina, algunos países que producen bauxita y alúmina también producen aluminio, como India, Australia y Rusia.
Aproximadamente una cuarta parte del aluminio producido cada año se utiliza en la industria de la construcción. Otro 23% se utiliza en estructuras de automóviles, cables, ruedas y otras partes de la industria del transporte. El papel de aluminio, las latas y los embalajes son también otro uso final importante y representan el 17% del consumo.
La amplia aplicación del aluminio lo convierte en uno de los mercados de metales más valiosos. En 2021, el tamaño del mercado mundial del aluminio era de unos 245.700 millones de dólares y se espera que casi se duplique hasta los 498.500 millones de dólares para 2030 a medida que crezca el consumo.